Ansiedad y estrés
La ansiedad es un mecanismo que se pone en marcha cuando percibimos que estamos en una situación de peligro o amenaza. Por lo tanto, es muy útil para la supervivencia, tanto que si no fuese por ella nos hubiéramos extinguido. El problema aparece cuando la intensidad es desproporcionada y/o se mantiene en el tiempo, lo que interfiere en la vida de la persona.
La sintomatología puede ser muy variada y se suele dar a 4 niveles: fisiológico (sudoración, taquicardía, hiperventilación...) cognitivo (anticipaciones negativas, problemas de memoria y atención, preocupaciones repetitivas...), emocional (angustia, miedo, irritabilidad, nerviosismo...) y conductual (evitación de las situaciones, agitación, ingesta compulsiva...).
Entre los trastornos de ansiedad podemos encontrar:
- Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG)
- Fobias específicas
- Fobia social
- Trastorno de pánico
- Agorafobia
Sin embargo, el estrés, que a menudo se confunde con la ansiedad, porque a veces se dan al mismo tiempo, aparece cuando sentimos que la situación que vivimos nos sobrepasa. Percibimos que nuestros recursos no llegan donde la situación nos exige.